Emanuel Elizalde se formó en el área de ingeniería química y alcanzó un doctorado en el campo de la microfluídica. Actualmente, utiliza la impresión con resina para desarrollar prototipos de dispositivos con microcanales, puertos y válvulas.
Su conexión con la ingeniería, la ciencia y el diseño se originó durante su infancia, cuando jugaba a armar cosas con Legos y desmontar electrodomésticos familiares para ver cómo funcionaban. Esa pasión lo llevó a estudiar ingeniería química.
La pandemia posibilitó su ingreso a un equipo de diseño de productos en Amazon. En el presente, opera su propio laboratorio, brindando consultoría a startups nacionales. El uso de impresión con resina le permite confeccionar prototipos de dispositivos con microcanales, puertos y válvulas.
Experiencia con Apolo Pro y Octopus
Emanuel utiliza la impresión 3D para generar chips de microfluidos, estos son pequeños dispositivos con microcanales a través de los cuales puede fluir el líquido que se analiza.
Este chip permite manipular con precisión cantidades ínfimas de fluido en microtubos a escala micrométrica para realizar diversas funciones en experimentos físicos, químicos o biológicos convencionales en un chip a escala micrométrica.
Hace una década, solíamos enfrentar largas esperas de semanas al dirigirnos a las instalaciones de CNEA o INTI para obtener los chips que necesitábamos. Estos chips eran extremadamente costosos, requerían diversos materiales en dólares, equipos de laboratorio especializados, sustancias químicas peligrosas y personal altamente capacitado. En la actualidad, he logrado alcanzar la misma resolución y una versatilidad considerablemente mayor mediante la utilización de la impresora Hellbot Apolo Pro y la Hellbot Octopus. Además solo necesito resina fotocurable y alcohol etílico.
En el otro modo de funcionamiento, una vez que el diseño ha sido ajustado, puedo fabricar pequeñas series de entre 10 y 100 piezas. Estas piezas de plástico nos permiten llevar a cabo pruebas en el laboratorio para obtener datos estadísticos sobre su rendimiento. De esta manera, podemos validar el diseño basándonos en las reacciones químicas y las operaciones unitarias que deseamos llevar a cabo en el chip. Hace unos años, esta posibilidad era impensable, ya que la única alternativa para obtener una pequeña serie de piezas era recurrir a procesos de matricería.
Durante años, utilicé la impresora más prestigiosa y costosa del mercado. Sin embargo, hoy no la consideraría como mi elección, las razones por las cuales optaría por una impresora como Apolo Pro son:
- Marca local y soporte postventa: Apolo Pro es una marca local que ofrece un excelente asesoramiento y servicio postventa.
- Inversión inicial reducida: La inversión inicial es significativamente menor, de 5 a 10 veces menos, mientras se obtiene la misma o incluso mejor resolución.
- Libertad de resina: Tienes la libertad de usar cualquier marca y tipo de resina, sin restricciones de firmware.
- Mayor control y ajustes:se puede ajustar más parámetros de impresión, incluso durante la impresión en tiempo real.
- Consumibles asequibles y duraderos: Los consumibles son más económicos y tienen una mayor durabilidad.
- Mejora de la productividad: Con una inversión mínimase puede agregar bateas y plataformas, lo que aumenta la productividad.
- Cura simultánea de capas: La pantalla cura toda la capa al mismo tiempo, lo que ahorra mucho tiempo al imprimir múltiples copias o variantes de un diseño en una sola impresión.
Como contrapartida, se requiere una mayor atención. Por ejemplo, la impresora no controla automáticamente el nivel o el tipo de resina en la batea. Sin embargo, estas características operan más como una pequeña barrera inicial, con un poco de capacitación, se superan.
Visualizo un futuro increíble para la manufactura digital. Está transformando la manera en que creamos y prototipamos, especialmente en nuestras economías emergentes. Pronto veremos resinas ecológicas y biodegradables, de curado ultrarrápido, junto con tecnologías de impresión continua que también revolucionarán la producción final. El futuro se está construyendo, capa a capa.
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